El ateísmo no es una realidad

Es difícil ver a Dios sin forma, y es difícil ver a Dios con forma. La ausencia de forma es muy abstracta, y  Dios con forma, aparece como demasiado limitado. Entonces, algunas personas prefieren ser ateas.
El ateísmo no es una realidad, es un asunto de conveniencia. Cuando tienes espíritu inquisidor, o que busca la verdad, el ateísmo se cae a pedazos. Con espíritu de investigación, no puedes negar algo que no ha sido refutado. Un ateo niega a Dios sin refutarlo primero. Para poder refutar a Dios, debes tener un enorme conocimiento. ¡Y cuando tienes un enorme conocimiento, no puedes refutarlo! (risas) Para poder afirmar que no existe, uno debería conocer sobre todo el universo. Así que no podrías ser cien por ciento ateo. ¡Un ateo es sólo un creyente que está durmiendo!
Para una persona, decir “No creo en nada”, significa que debe creer en sí misma – entonces, ella cree en sí misma ¡pero  ni siquiera lo sabe!
Un ateo nunca puede ser sincero, porque la sinceridad requiere profundidad – y un ateo se rehúsa a ir a lo profundo. Porque mientras más profundo va, encuentra un vacío, un campo de tantas posibilidades, y tiene que aceptar que hay tantos secretos que no conoce. Necesitaría reconocer su ignorancia, lo cual se rehúsa a hacer, porque en el momento en que es sincero, empieza a dudar de su ateísmo. ¡Es casi imposible un ateo libre de dudas! Por lo tanto, nunca puedes ser un ateo sincero y libre de dudas. Cuando un ateo se da cuenta de su ignorancia, ¿qué hace? ¿Dónde va? ¿Va a un Guru? ¿Qué hace un Gurú con él? (¡Espera las próximas semanas de conocimiento!)

Es difícil ver a Dios sin forma, y es difícil ver a Dios con forma. La ausencia de forma es muy abstracta, y Dios con forma, aparece como demasiado limitado. Entonces, algunas personas prefieren ser ateas.